El aumento de pecho es la intervención de cirugía estética número uno en los Estados Unidos, España, Reino Unido….a pesar de que todavía presenta una carga de prejuicio social.
Siendo esto así,
¿cuales son las razones o motivaciones que llevan a estas mujeres a operarse?,
¿son acaso jóvenes e inseguras, quizás superficiales…?
Las respuestas podrían sorprenderte, pero para tratar de dar luz a esta pregunta vamos a partir de algunas estadísticas de esta intervención en EEUU.
De los 300.000 procedimientos de implantación de prótesis en los Estados Unidos en 2013, la distribución por edad, según estadísticas de la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos, es la siguiente: intervenciones a pacientes entre 13 y 19 años: 8,234, entre 20 y 29 años: 83.638, entre 30 y 39 años: 105.877, entre 40 y 54 años: 85.516 y por último de más de 55 años: 6.934.
Como puede verse, el mayor número de intervenciones corresponde al grupo de mujeres de entre 30 a 39 años.
La mayoría de las mujeres de entre 30 y 39 años de edad están en edad de tener descendencia.
Muchas mujeres pierden el volumen del pecho después del embarazo, y no son felices con la forma de sus pechos, al igual que tampoco lo son aquellas mujeres que se someten a regímenes severos, para conseguir una pérdida importante del peso.
No hay manera de recuperar el volumen de los senos, de ninguna forma sino mediante el empleo de los implantes mamarios, ya que no existen ni antes ni después del aumento de pecho ejercicios que construyan el tejido mamario de nuevo.
Todo ello hace que estas mujeres, recurran a los implantes de mamas para restaurar el tamaño de sus pechos y su forma original de antes del embarazo.
Los resultados en la mejora del volumen y forma obtenidos (ver fotos de antes y despues) dejan felices a las mujeres que se los realizan.
Estas intervenciones de restauración de la forma y tamaño de los pechos, junto con algunos otros procedimientos para mejorar la figura tras el parto, como las intervenciones de abdominoplastias y liposucciones, son conocidas en términos anglosajones como «mommy makeover«.
De los 85.000 más procedimientos de aumento de pecho entre las mujeres de mediana edad, esto es cuya edad se encuentra comprendida entre los 40 y los 54 años, uno puede asumir que ha sido con tratar de parar el envejecimiento de los senos y sus estructuras mamarias.
Pensemos también que hubo más de 92.000 cirugías de párpados (una cirugía que suele estar asociada a la aaprición de los primeros signos de envejecimiento) en ese grupo de edad.
Con respecto del número de intervenciones o procedimientos de aumento de pecho para el grupo perteneciente a la franja de edad comprendida entre las mujeres de 20 a 29 años, las estadísticas muestran para dicho grupo de edad, se realizaron 69.000 cirugías de la mejora de la nariz.
Así que sí, es posible que pueda haber una insatisfacción corporal entre este grupo demográfico, pero en cualquier caso parece ser que no es tan solo una cuestión que atañe a los pechos de forma exclusiva.
En EEUU existe una clara indignación o desaprobación por parte de los medios hacia la tendencia de regalar a estas chicas una intervención de cirugía plástica para aumento mamario como regalo de fin de graduación.
En España esto no existe: los cirujanos plásticos pertenecientes a la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE), no realizan intervenciones de aumento de senos en las mujeres menores de 18 años, ya que el tejido mamario no se considera completamente desarrollado hasta ese momento, aunque los senos pueden y de hecho cambian de tamaño y forma de una manera más acusada tanto durante la lactancia como de la menopausia.
Sin embargo, ciertos procedimientos pueden llegar a ser necesarios para las mujeres jóvenes:
Y para poner ese número en perspectiva de 8.000 chicas intervenidas, tengamos en cuenta que casi 6.000 adolescentes en el mismo grupo de edad de 13 a 19 años, se realizó una cirugía de reducción de mama para eliminar la ginecomastia (agrandamiento mamario masculino) ese mismo año.
Otros 30,000 adolescentes, entre chicos y chicas, también fueron intervenidos de cirugías de nariz.
Por lo tanto es bastante probable, que estas cirugías en este grupo de edad, sean a menudo con un fin correctivo de alguna malformación o disfuncionalidad que meramente estético.
¿Qué es un tamaño de senos extremo y que es «normal»?
Los cuerpos de las mujeres son de todas las formas y tamaños, y sus pechos no permanecen iguales. Los fabricantes de sujetadores y la industria de ropa íntima, son conocedores del verdadero tamaño de los pechos de las mujeres, y además los cuerpos rara vez son perfectamente proporcionales.
Algunas mujeres con unos cuerpos pequeños, heredan unos pechos desmesurados, que por falta de proporcionalidad con el resto del cuerpo, todavía parecen mucho mayores. Resulta que sujetadores de copa profunda en las tallas más pequeñas (de 28 a 32 espaldas con copas DD a J) son el segmento de más rápido crecimiento de la industria del sujetador, y ello no es debido a que se comercializan para las mujeres jóvenes con implantes mamarios.
Los implantes mamarios no se miden por el tamaño de la taza sino por el volumen expresado en centímetros cúbicos, de la prótesis mamaria a implantar. Los cirujanos plásticos saben que un implante de 300cc para una mujer delgada y de estatura mediana, se verá muy diferente en un cuerpo más alto o más ancho.
La mayoría de las pacientes desean un aumento de senos que las hace pasar de una copa B a una C o a D, lo cual bajo ningún concepto puede ser tachado de tamaño súper grande.
Numerosos estudios intentaron mostrar si existía una preferencia por parte de los hombres, por un tamaño de senos sobre otro, y todos los estudios parecen contradecirse unos a otros.
Conclusión: a los hombres les gustan los pechos.
¿Por qué pues las cirugías estéticas en los pechos de las mujeres, hacen que se hable de ello más que de todas las intervenciones de nariz, ojos, y liftings combinados?
Es difícil de decir.
Pero las mujeres no se quejan, e incluso a pesar de tener que pasar un postoperatorio y recuperación, así como de tener que cuidar la cicatriz la cirugía de senos, de forma general reportan una mayor autoestima y confianza en sí mismas después de las cirugías.
Algunos nuevos procedimientos de mejora de la forma y tamaño incluso utilizan la grasa propia de una mujer para construir su tejido mamario.
El número de intervenciones de elevación de seños o mastopexia, no deja de elevarse cada año, así como las intervenciones de reducción de senos.
Las mujeres están eligiendo cuál es la forma y tamaño que desean para sus pechos con la cirugía estética, y acaso
¿no es una cuestión de preferencia personal de cada una?.
Si una mujer quiere ajustar el tamaño o la forma de sus senos,
¿quiénes somos nosotros o cualquier persona, para juzgar esa decisión?